La extracción de leche puede hacerse de forma manual o mecánicamente con una bomba extractora (o sacaleches). En cualquier caso es importante conocer la técnica para conseguir una cantidad adecuada de leche así como para evitar dañar el pecho.
MOTIVOS EXTRACCIÓN DE LECHE
En caso de separación madre bebé
- Ingreso del bebé
- Enfermedad materna
- Vuelta al trabajo
- Motivos personales
Si el bebé no es capaz de alimentarse por si mismo
- Succiona débil o ineficazmente
- Si el bebé está adormilado o apático
Aliviar el pecho
Aumentar producción
- El bebé ha perdido más peso del habitual tras el parto o le cuesta recuperarlo
- Relactar
➡ Éstas instrucciones también te pueden servir para la extracción de calostro en el embarazo. Hay muchas buenas razones para extraer el calostro antes del nacimiento de tu bebé. MUY IMPORTANTE, EMPEZAR SIEMPRE DESPUÉS DE LAS 36 SEMANAS DE GESTACIÓN
- La extracción manual de calostro puede ayudar a estimular el parto y, por lo tanto, reducir el riesgo de tener una inducción .
- Ayuda a estimular la producción de leche .
- Dispondrás de un remanente, para los primeros días de vida del bebé, cuando aún no te ha subido la leche y el bebé suele perder algo de peso. (Congelar el calostro en pequeñas jeringas)
- Tu bebé recibirá sólo leche materna, incluso si él / ella tiene problemas para mamar y se ve afectado/a por niveles de azúcar bajos.
- Tu bebé se beneficiará de las ventajas de recibir tu leche.
PREPARACIÓN PARA LA EXTRACCIÓN
- Lavado de manos con agua y jabón. No hace falta lavar los pechos antes, es suficiente con tu ducha habitual.
- Ambiente intimo y relajado
- Estimular liberación de oxitocina bebé, con una foto suya, oliendo su ropa…
- Postura cómoda
- Agua caliente
ESTIMULAR LA BAJADA DE LECHE
Tanto si se va a extraer la leche de forma manual como con bomba debes primero preparar el pecho para facilitar la extracción, provocando el reflejo de bajada o de eyección láctea. Para ello puedes seguir tres pasos: masajea, frota, sacude.
MASAJEA, oprimiendo firmemente el pecho hacia la caja torácica (costillas), usando un movimiento circular con los dedos en un mismo punto, sin deslizar los dedos sobre la piel. Después de unos segundos ve cambiando hacia otra zona del seno.
FROTA el pecho cuidadosamente desde la parte superior hacia el pezón, de modo que produzca un cosquilleo. Continúa este movimiento desde la periferia del pecho hacia el pezón, por todo alrededor.
SACUDE ambos pechos suavemente inclinándote hacia delante.
EXTRACCIÓN MANUAL (TÉCNICA DE MARMET)
1.- Coloca el pulgar y los dedos índice y medio formando una letra “C” a unos 3 ó 4 cm. por detrás del pezón (no tiene que coincidir forzosamente con el final de la areola). Evita que el pecho descanse sobre la mano.
2.- Empuja los dedos hacia atrás (hacia las costillas), sin separarlos. Para pechos grandes o caídos, primero levántalos y después empuja los dedos hacia atrás.
3.- Rueda los dedos y el pulgar hacia el pezón, del modo en que se imprimen en un papel las huellas digitales (rueda pero no deslices).
4.- Repite rítmicamente para vaciar los depósitos (coloca los dedos, empújalos hacia adentro, ruédalos).
5.- Ve rotando la posición de los dedos para vaciar otras partes del pecho. Utilice ambas manos en cada pecho.
EVITA estos movimientos
Tiempo -El procedimiento completo debe durar entre 20 y 30 minutos. -Extrae la leche de cada pecho de 5 a 7 minutos. -Masajea, frota y sacude. -Extrae nuevamente de cada pecho de 3 a 5 minutos. -Masajea, frota y sacude. -Extrae una vez más de 2 a 3 minutos. -Si tu producción de leche ya está establecida, utiliza los tiempos anteriores sólo como una guía. Si aún no hay leche o hay poca, sigue los tiempos anteriores cuidadosamente. |
Procedimiento -Este procedimiento deberán usarlo las madres que están extrayendo su leche en lugar de amamantar al bebé, y por aquellas otras que desean establecer, aumentar o mantener la producción cuando el bebé no puede mamar. -Extrae la leche de cada pecho hasta que el flujo de leche se haga más lento. -Provoca el reflejo de bajada en ambos pechos (masajea, frota, sacude). Puede hacerse simultáneamente. -Repite todo el proceso de exprimir y provocar el reflejo de bajada en ambos pechos, una o dos veces más. El flujo de leche, generalmente, se enlentece más pronto la segunda y tercera vez, a medida que los reservorios se van vaciando. |
EXTRACCIÓN CON BOMBA
El procedimiento que debes seguir es el mismo que para la extracción manual, salvo que la leche la extraerás con un sacaleches. Es decir, comienza con el lavado de manos, estimula la bajada de leche como se ha explicado anteriormente, y aplica la bomba al pecho siguiendo las instrucciones del apartado “Procedimiento”. Los tiempos de extracción de cada pecho son los mismos que se explican en el apartado “Tiempo”, provocando el reflejo de bajada (masajea, frota y sacude) intercalado con la extracción.
En cuanto a los tipos de bombas, existen varios modelos. Como norma general una bomba debe realizar la succión de modo intermitente, y la fuerza de succión debe ser regulable. Las hay manuales, de pilas y con conexión a la red eléctrica. Si vas a tener que extraerte leche de forma habitual durante un tiempo, te resultarán más cómodas estas últimas. Sigue las instrucciones del fabricante. En la mayoría de las bombas, hay que situar el pezón en el centro de la copa de modo que no toque las
paredes. No debes hacerte daño, empieza con potencias de succión baja. Si al principio no sale leche, vuelve a provocarse el reflejo de eyección.
CONSERVACIÓN Y ALMACENAMIENTO DE LA LECHE
Leche madura recién extraída y guardada en un recipiente cerrado se mantiene a temperatura ambiente, a 25º C o menos, durante 8 horas y en el frigorífico, a 4ªC o menos durante unos tres días. No la pongas en la puerta, ponla al fondo.
La leche congelada se conserva durante:
-2 semanas en el congelador incluido dentro del frigorífico (*/***).
-3 a 6 meses en el congelador de puerta separada del frigorífico. (-18ºC***)
-6 a 12 meses en congeladores de tipo comercial a (-20ºC***)
Antes de congelar déjala enfriar en la nevera, lejos de la puerta. Se puede juntar leche de varias extracciones a lo largo de un mismo día. Mantén la leche fría en el frigorífico hasta la noche. Luego congélala en las cantidades apropiadas. No añadas leche tibia a leche ya congelada.
Cómo descongelar y calentar la leche -Se recomienda, siempre que sea posible, descongelar despacio en el frigorífico. -Si no es posible descongelar despacio, se puede poner el recipiente con la leche congelada, debajo del grifo, empezando con el agua fría y se va poco a poco aumentando a tibia y a más caliente hasta alcanzar la temperatura adecuada. (o al baño Maria) -No dejar hervir la leche. -Agitar antes de probar la temperatura. -No usar microondas para calentar la leche materna. |
Manipulación de la leche materna -La leche que ha sido descongelada dentro del frigorífico (pero no calentada ni usada antes) se conserva a temperatura ambiente 4 horas y en el frigorífico 24 horas. -No volver a congelar leche que ha sido descongelada. -La leche que ha sido descongelada bajo el grifo de agua tibia, sólo se conserva a temperatura ambiente mientras dura la toma. -La leche descongelada bajo el grifo de agua tibia sólo se conserva en el frigorífico durante unas 4 horas. -Desechar la leche que sobra de la toma |
Cuando descongeles, la grasa de la leche materna se separará y flotará en la parte superior de la misma. Tampoco te asustes si te parece que huele rancio. Es normal. La leche estropeada normalmente huele agria. Mueve el recipiente circularmente y volverá a tener el aspecto de siempre.
Recuerda que el color, la consistencia y el olor de tu leche pueden variar, dependiendo de tu dieta o si la leche está expuesta a otra comida en tu frigorífico o congelador. El color de la leche extraída puede ser azulada, amarillenta o incluso tirando a marrón.
Existen en el mercado distintos productos para la conservación de la leche, pero en general resultan caros. Un truco económico y sencillo es utilizar bolsas de congelar para uso alimentario que encontrarás en cualquier supermercado. Una vez introducida la leche y bien cerrada, la puedes introducir en un vasito, taza, tartera, etc., para que se congele con la forma deseada.
Una vez congelada con forma es más fácil almacenarla. Lo ideal es que metas las bolsitas ya con forma dentro de un a tartera grande para que no se rocen con los demás alimentos que haya en el congelador.
Acuérdate de etiquetar o/y numerar cada bolsita para que luego sepas en qué orden usarlas.
Lo ideal es congelar de 30 ml en 30 ml, de 50 ml en 50 ml, o a lo sumo de 70 ml en 70ml. Si tu bebé necesita 120 ml es preferible descongelar dos de 70 y tirar 20 que descongelar 3 de 50 y tirar 30.
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